sábado, 13 de marzo de 2010

Desmayo sentimental




Desmayo sentimental

Me estoy volviendo

demasiado sensible

desde que ya no disfruto con esos regueros de sangre a lo bizarro, si me siento en el sillón a evadir, a mentirme con cada palabra, a pensar que esto no es un sueño, párrafo tras párrafo, más torpe que no pude siquiera hacerme con las pastas:

Después cambiabas de canal

(…) y se me cristalizan

los ojos

cuando sale alguien

sufriendo

y luego (…)

y luego, maldita sea, me hice el fuerte y le quité hierro al asunto con alguna chorrada y cada día lo veo más cerca del día en que desvié la mirada del suelo

como si nada

como si nunca pudiera permitirme ciertos lujos.