sábado, 25 de octubre de 2014

Marcarse un Warhol




























A veces, Andy, esconderse está bien.
Siempre habrá una peluca, unas gafas,
cualquier cachivache, y sobre todo,
palabras
que nos lo pongan fácil.
Pero a solas, la fiesta
se convierte en algo odioso.
Y todo está espeso.
A veces, la eternidad es un duro trabajo.
Y, a veces, no asirse demasiado a las cosas
o a las personas
es el mejor marco
con el que puedes proteger
tu fracaso
ante otra posible obra de arte.