MEJORES DÍAS, DE JOSÉ LUIS MORANTE

Portada.

Partiendo del viaje de Terencio hacia ese océano que no le es ajeno y a sabiendas de que Amicus Plato, sed magis amica veritas; con esa verdad abrimos fuego. Ahora se lleva lo concentrado, la música del aforismo, la esencia del último acorde que clausura la pieza. Suena.

Morante no está dispuesto a pedir excusas. Lo siente..., la no cuenta atrás. Ahora pedir la cuenta en esa rama lo llaman, es, poesía de aforismos. En suma, con resumen y todo: cae el agua, impecable hasta el sueño. La encima es aislada una y otra vez. Es como si.

Luego, por el microscopio hay algo de aristócrata en cada palabra, algo de morfina en cada palabra, algo del todo y nada en cada suspiro. La receta.

Para no poder morir, son los pies mellados los únicos que aluden al raciocinio durante los pasos. Dentro de cada celda más celdas. Dentro de cada máxima, millones de mínimas. La partícula. El átomo o menos aún. El Yo donde solo son palabras; las palabras que lo fueron todo, todo, porque los tesoros andan sueltos evadiendo las manos del vértigo y tal vez, José Luis, vengan, o ya estén aquí sometidos a la mesa, esos Mejores Días que lo hagan todo más asequible.

José Luis Morante, en su estudio

Algunas de las joyas de Mejores Días:

"Toda reflexión sobre el fracaso acaba en fracaso"

"Ninguna conducta en su itinerario sigue una línea recta, aunque la ingenuidad lo cree."

"En cada uno de nosotros habita una identidad perturbadora. Es ese rostro que nos avergüenza,

pero cuyo comportamiento justificamos, como resignados a su compañía."

"Poesía como búsqueda civil de la verdad."

"En nuestra memoria hay una zona umbría, sin carga significativa, en la que se refugian nombres propios, sequías emocionales,concesiones, secretos. Desde allí emprenden una fluida transición hacia el olvido"

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MEJORES DÍAS.

EDITORIAL: DE LA LUNA LIBROS

2009

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