lunes, 4 de enero de 2010

JOSÉ ORTEGA



Sorprenderse, extrañarse, es comenzar a entender. Es el deporte y el lujo específico del intelectual. Por eso su gesto gremial consiste en mirar el mundo con los ojos dilatados por la extrañeza. Todo el mundo es extraño y es maravilloso para unas pupilas bien abiertas. Esto, maravillarse, es la delicia vedada al futbolista(...)
La aglomeración, el lleno, no era antes frecuente. ¿Por qué lo es ahora?
¿Cómo es el hombre-masa que domina hoy la vida pública(...)? ¿Por qué es como es. quiero decir, cómo se ha producido?

Texto extraído de "La rebelión de las masas". Ortega y Gasset