martes, 9 de diciembre de 2014

HAMBRE. POR BACO



El  poema de hoy me lo aprendí de memoria, y no con premeditación, nocturnidad y alevosía, sino como (sé que tú y solo tú, lector, te salvas del tedio humano) solemos hacerlo todo: por pura inercia; por el devenir caótico que incita a nuestras cuerdas vocales a decir "vale". Así de grande. Muchas veces te preguntas cómo has llegado hasta un determinado lugar (ahora lidio en mi cocotera con el esquema de imagen de CAMINO, con todo lo que eso conlleva...) y tu cerebro al procesarlo te remite al solo encogimiento de hombros. Al modo de un buen actor principal en una peli de gran tonelaje (quizás tu vida, lector). Algo así.
     El caso es que este poema de aquí abajo salió de la mano de Esteban Gutiérrez, más archiconocido como Baco,y si uno lo desea poseer como fetiche personal puede encontrarlo en el interior de un (¿puedo decir "fantástico" sin que suene a lugar común?) poemario intitulado Ardimiento, del cual no diré nada más porque si uno tiene interés y aporrea un poco el teclado o martillea vehementemente la pantalla táctil y, como por arte de magia bla, bla, bla, pues eso: HAMBRE


HAMBRE

He tardado en darme cuenta
y ahora   sé   porqué
en todos los órdenes de la vida
....los que llegan a la cumbre del poder,
....los que coronan la cima,
no son
....los mejores, ni
....los más sabios, ni
....los más fuertes, ni
....los más honrados.

Ahora sé que
....los que nos dominan son
....los más hambrientos,
....los que lo quieren todo y
no les importa
qué hacer
para conseguirlo,
ahora sé que son
....los más egoístas,
....los que más determinación tienen
para lograr sus objetivos,
....los que jamás ponen en su alma
una pizca de corazón,
....los que falsean sus sonrisas,
....los que mienten con sus palabras,
....los de las miradas feroces
....los egoístas
solitarios
de la cúspide,
....los que olfatean el dinero y el poder
en busca de la próxima presa.

Y ahora sé
que ellos son
....los lobos
y nosotros,
....los conformistas,
....las ovejas,
y que somos su alimento
y que siempre

tendrán

hambre.