miércoles, 3 de marzo de 2010

LA LUZ NUEVA


Debo reconocer que he metido un libro en la vidriera de mi librería y esta vez me ha dado un poco de pena. Pena porque tardaré un tiempo en volver a entrar en él. Aunque seguramente lo haga en más ocasiones porque algún virus me ha dejado dentro que no logro identificar del todo. Es cierto que puedes estar de acuerdo o no con lo que dice Vicente Luis Mora, pero nadie puede decir que Vicente no tenga en sus manos el arma que más respeto produce en el lector, que se ve asaltado por su contundencia.Esta arma no es otra que la objetividad. Y con esto, hablando de "La luz nueva" comenzamos.
Personalmente, pienso que la crítica es tan necesaria en la Literatura como también los son, y por poner un ejemplo, los historiadores en la Historia..., o los reponedores de las estanterías del supermercado de abajo cuando mi nevera está vacía. Mi nevera no estaba vacía pero sí que le venían bien unos cuantos líquidos, o si no, iba a deshidratarme...
Lo que suele suceder (y esto puede ser extrapolable a todos los niveles de la ciencia, del arte, de la sociedad, y etcétera) es que la mayor parte de nosotros necesitamos refuerzos para sentirnos realizados. Y cuando alguien nos dice las cuatro verdades que menos nos gustaría oír, a lo mejor nos asalta un poco el desconcierto y el cabreo. Entonces decimos que "la crítica es una mierda". Y a lo mejor estamos equivocados. O puede que puntualmente estemos en lo cierto, qué sé yo; pero lo que sí que sé es que alguien se tiene que ocupar de lo que más nos inquieta a los escritores y de las respuestas que damos a esas inquietudes.
La nueva luz se ocupa de lo que puede ser el futuro de la literatura hispana; de las corrientes y tendencias que más acordes están con lo que debiera ser una evolución en toda regla. Y en esta evolución es indudable la presencia constante de la tecnología; de la creciente tendencia a la virtualización de nuestras vidas. En esto el escritor no debe, ni seguramente pueda quedarse al margen; de hecho es imposible sustraerse a esa omnipresencia de la tecnología y la nueva sociedad de la información/comunicación/ocio. Pero me desvío...
El libro que hoy nos atañe se estructura sobre dos pilares. Por un lado están las direcciones estéticas de la cultura actual: tardomodernidad, pospodernidad, literatura pangeica.Desde un principio, Vicente, planta cara con verdades como esta de aquí: "La narrativa española ha dejado de ser literatura para convertirse en mercado editorial" y también se dice que "la crítica literaria ha dejado de ser crítica para convertirse en propaganda". La segunda parte abarca los planteamientos recogidos en la bitácora personal de Vicente L.M. O sea: Diario de lecturas (recientemente premiada como mejor blog nacional de crítica literaria). De este modo "La luz nueva" se mantiene con vida, enriqueciéndose cada día a través del blog, interaccionando con el lector; así, no es algo cerrado y definitivo. Un acierto.
Hace ya casi tres años que V.L M arrojó "La luz nueva" a nuestro mundo. Y desde entonces ha llovido mucha agua. Y personalmente me alegra que exista alguien que maneje la estación meteorológica y que me diga cuánta agua ha caído. Y caerá.